| La persona demoníaca piensa: «Hoy tengo tanta riqueza y ganaré más de acuerdo a mis ardides. Tanto es mío ahora e incrementará más y más en el futuro. Él es mi enemigo y lo he matado, mis otros enemigos también morirán. Yo soy el señor de todo, soy el disfrutador, soy perfecto, poderoso y feliz. Soy el hombre más rico rodeado de parientes aristócratas. No hay nadie tan poderoso y feliz como yo. Ejecutaré sacrificios, daré alguna caridad y así me regocijaré». De esta forma, tales personas están engañadas por la ignorancia.
| |
|